Edith Jimenez
Reynosa, Tam.-Indigentes que se encuentran rodando por la ciudad son unas de las victimas del golpe de calor y deshidratación debido a las altas temperaturas que azotan la región.
Pese a que en Reynosa se cuenta con una casa del indigente, donde se les brinda albergue y alimentos, desafortunadamente las personas en situación de calle se niegan a trasladarse al abergue, teniendo que soportar las altas temperaturas y el hambre.
Se prevé que la casa del indigente inicie un censo para conocer la cifra exacta de personas que viven en las calles y buscar programas de ayuda.
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